Toda bonita historia tiene un inicio…

“Ahora hemos puesto en marcha este local moderno y cercano donde queremos contagiar a nuestros clientes de la pasión por los guisos mexicanos”, son las palabras de Luis Eduardo Porras, que en su día fue el gerente de Malpaso y ahora es uno de los socios de Chihuahua.

Equilibrio. Producto. Sabor. Intensidad. Una apuesta por lo mejor de México con todo su carácter. En Chihuahua se propone una cocina elaborada, con sugerencias muy ricas y variadas basadas en la tradición.

Para empezar siempre nos recomiendan el Guacamole hecho en el momento que tiene en su sabor un toque muy mexicano; merece la pena también, saborear los Nachos Malpaso. Y, por supuesto, no hay que olvidarse de degustar los Tacos Dorados, que tortillas de maiz fritas, rellenas de pollo, servidas con salsa verde y crema agria.

Si preguntamos sobre lo que tenemos que probar para conocer las verdaderas esencias mexicanas, la mejor respuesta sería:

“Hay que tomar la Cochinita Pibil que lleva carne de cerdo deshebrada con salsa de finas hierbas y horneada en su jugo con axiote, desde luego la Tinga Poblana elaborada con pollo deshebrado con tomate y salsa de chile chipote y también, el Alambre de pollo, pimientos, cebolla, bacon y queso gratinado. Además, nunca debería faltar el Mole Poblano, pollo cocinado con una salsa muy intensa elaborada con 28 ingredientes que se termina con chocolate lo que le da un sabor muy especial y muy característico”.
Luis Eduardo Porras